Primero fue el seleccionado de menores de vóleibol femenino y ahora la sub 17 de fútbol. En menos de un año dos representativos nacionales en los deportes más populares en nuestro país, clasifican a un mundial de la categoría, a México y Corea del Sur, respectivamente. Las “matadorcitas” ganaron el boleto, tras derrotar en el Sudamericano, disputado el 2006 en Lima, a Venezuela y a Argentina. Claro, menos a Brasil, ya que la diferencia competitiva todavía es enorme.
Hoy los “jotitas” como se les ha dicho a este equipo de fútbol, dirigido por JJ Oré, también ya está en el Mundial por méritos propios y no por ser dueño de casa, como ocurrió en la edición anterior disputada en suelo nacional. La delegación nacional debe llegar a las 8 p.m. procedente de Quito. Se tomará los días que necesita un equipo para descansar y saltar a la cancha. Los dirigentes, el IPD y el gobierno, deben sumar esfuerzos para ya empezar a disponer lo necesario para preparar un equipo que llegue primero a Río de Janeiro (Brasil) para los Juegos Panamericanos y luego a Corea del Sur a ser protagonista, como en el Sudamericano.
Partidos a montón, giras y la atención que la juventud merece, ya que ellos aún no están contaminados de esa mediocridad que identifica a los seleccionados adultos. No esperemos que los temas de corrupción a nivel de autoridades deportivas, caso Manuel Burga, titular de la Federación Peruana de Fútbol, mermen el rendimiento y motivación de los jóvenes abanderados del fútbol nacional.
Hoy muchos chicos, entre ellos mis hijos, cuyas edades frisan los 7-9 años, saborean un triunfo peruano, en vivo y en directo. Y aquel domingo cuando no creían que le habíamos ganado 2-1 a Brasil, perdurará en sus corazones emocionados, pintados de rojo y blanco. Arriba Perú!
Hoy los “jotitas” como se les ha dicho a este equipo de fútbol, dirigido por JJ Oré, también ya está en el Mundial por méritos propios y no por ser dueño de casa, como ocurrió en la edición anterior disputada en suelo nacional. La delegación nacional debe llegar a las 8 p.m. procedente de Quito. Se tomará los días que necesita un equipo para descansar y saltar a la cancha. Los dirigentes, el IPD y el gobierno, deben sumar esfuerzos para ya empezar a disponer lo necesario para preparar un equipo que llegue primero a Río de Janeiro (Brasil) para los Juegos Panamericanos y luego a Corea del Sur a ser protagonista, como en el Sudamericano.
Partidos a montón, giras y la atención que la juventud merece, ya que ellos aún no están contaminados de esa mediocridad que identifica a los seleccionados adultos. No esperemos que los temas de corrupción a nivel de autoridades deportivas, caso Manuel Burga, titular de la Federación Peruana de Fútbol, mermen el rendimiento y motivación de los jóvenes abanderados del fútbol nacional.
Hoy muchos chicos, entre ellos mis hijos, cuyas edades frisan los 7-9 años, saborean un triunfo peruano, en vivo y en directo. Y aquel domingo cuando no creían que le habíamos ganado 2-1 a Brasil, perdurará en sus corazones emocionados, pintados de rojo y blanco. Arriba Perú!